Guión: Geoff Johns
Dibujo: Ethan Van Sciver
Planeta; 176 páginas, 12'95€
Dibujo: Ethan Van Sciver
Planeta; 176 páginas, 12'95€
Obligado por las buenas críticas que recibía esta obra de Geoff Johns, por fin me he animado a leerla, y el veredicto es...
Johns es un genio. Conoce la continuidad a la perfección, así lo demuestra, y así consigue manejarla para que, aún en un primer contacto con estos personajes, esta leyenda de los Lanterns, no se convierta en confuso; por el contrario, vuelve los hechos, las situaciones y a los personajes familiares. Crea y recrea la historia a su antojo, pero como pocas veces se hace: con cariño no sólo a las ventas, si no por la historia, y por los nombres que han escrito antes que él a los linternas, y haciéndolos crecer, tan sólo volviendo la vista atrás para seguir adelante.
La historia, con su regusto clásico, es todo un homenaje a la amistad, a los compañeros, y al legado. A la confianza, en el propio poder, y en el de los que han jurado protegerte. Pero... Hay un pero. Como digo es una muy buena historia de súpers, un tributo a las historias clásicas, con una amenaza primordial que es vencida por el poder de la unión, del grupo, de su unión. Pero es un homenaje a los Green Lanterns, en especial a Hal Jordan, que aún resultando en una lectura interesante, satisfará sobre todo a sus seguidores más fieles. Es una buena historia, sí, pero sobre todo, es el tributo de Geoff Johns a una mitología.
Así, con el trabajo de Van Sciver complementándolo de manera espectacular, lo único malo achacable al argumento, es el resultado de volver a ver a Hal Jordan, ni como espectro ni como Parallax: un desenlace típico, demasiado para mi gusto, en el que el héroe vuelve, aunque nos digan que nunca se fue.
Valoración: *****
Johns es un genio. Conoce la continuidad a la perfección, así lo demuestra, y así consigue manejarla para que, aún en un primer contacto con estos personajes, esta leyenda de los Lanterns, no se convierta en confuso; por el contrario, vuelve los hechos, las situaciones y a los personajes familiares. Crea y recrea la historia a su antojo, pero como pocas veces se hace: con cariño no sólo a las ventas, si no por la historia, y por los nombres que han escrito antes que él a los linternas, y haciéndolos crecer, tan sólo volviendo la vista atrás para seguir adelante.
La historia, con su regusto clásico, es todo un homenaje a la amistad, a los compañeros, y al legado. A la confianza, en el propio poder, y en el de los que han jurado protegerte. Pero... Hay un pero. Como digo es una muy buena historia de súpers, un tributo a las historias clásicas, con una amenaza primordial que es vencida por el poder de la unión, del grupo, de su unión. Pero es un homenaje a los Green Lanterns, en especial a Hal Jordan, que aún resultando en una lectura interesante, satisfará sobre todo a sus seguidores más fieles. Es una buena historia, sí, pero sobre todo, es el tributo de Geoff Johns a una mitología.
Así, con el trabajo de Van Sciver complementándolo de manera espectacular, lo único malo achacable al argumento, es el resultado de volver a ver a Hal Jordan, ni como espectro ni como Parallax: un desenlace típico, demasiado para mi gusto, en el que el héroe vuelve, aunque nos digan que nunca se fue.
Valoración: *****
1 comentario:
un gran cómic, sí señor. Lástima que la serie regular no esté a la altura.
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