Panini; 24 páginas, 1'7€
Otro mes más, un número más de Jóvenes Vengadores tras cuya lectura nos quedamos con ganas de más, de querer disfrutando con la serie.Una vez más, Heinberg nos deja con la boca abierta con sus espectaculares guiones, siempre sorprendentes e inteligentes, siempre buscando esa nueva vuelta de tuerca a la historia que no la haga decaer un ápice: esa pequeña trampa reservada para el final con el que enganchar al lector.
Aunque el ritmo de la colección se ha visto ralentizado en gran medida con los dos últimos números aparecidos en nuestro país, destinados por completo a plasmar la épica batalla que nuestros jóvenes protagonistas deben afrontar, la colección no se resiente lo más mínimo, gracias en gran medida a los lápices de Cheung, que plasma de manera espectacular y efectiva los guiones de Heinberg con un estilo personal que destaca en este episodio, sobre todo, por la claras referencias estilísticas del mundo de la TV. La narración de la que hace gala este número en sus primeras páginas recuerda poderosamente a los minutos iniciales de esas famosas series que se encuentran en boca de todos, hasta culminar en una espléndida splash-page con la que disfrutaremos de los créditos iniciales.
Otra de las cosas muy a tener en cuenta es la personalidad con la que Heinberg ha dotado a us personajes, desarrollándolas en este número de manera perfecta durante la incesante batalla contra Kang, dónde además se dejan entrever las futuras relaciones que tendrán lugar entre los diferentes miembros del grupo.
Un mes más, Jóvenes Vengadores se convierte en una de las colecciones imprescindibles, esas que debes seguir seas fan o no de la compañía; sólo hace falta que te gusten las buenas historias de superhéroes.
Valoración: 8/10. Aunque la historia se haya visto mínimamente frenada debido al enfrentamiento al que hemos asistido en los últimos números, el trabajo de ambos artistas es simplemente implecable.
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