Guión: Garth Ennis
Dibujo: Clayton Crain
Panini; 144 páginas, 12€
Dibujo: Clayton Crain
Panini; 144 páginas, 12€
Cada noche viene a por él lo peor del infierno. Cada noche, le desgarran y le destripan; le rajan y le cortan; le machacan y le destrozan; le violan y le condenan hasta que no queda nada, excepto su alma. Pero, cuando amanece, lo vuelven a reconstruir. Y todo vuelve a empezar otra vez.
Cada noche, cabalga hasta las puertas del mismo infierno tras las que podrá encontrar la libertad. Pero cada noche, cada noche, le vuelven a arrastrar abajo. La salida, a la vez tan cerca y tan lejana, es imposible de alcanzar. Por ello, tan sólo le queda encomendarse a la promesa de un ángel: quizá sea la única forma de no volver a ser torturado una y otra vez, cada noche, a las puertas de la libertad.
Antes de hacerme con la BM del Motorista Fantasma de Panini, no quería llegar virgen al personaje, y conocer al menos esos pequeños detalles que constituyen el pilar básico de su carácter, de su personalidad. Pero creo que me he equivocado de serie para ello.
En esta limitada, guionizada por Ennis, veremos el desesperado intento de huida del Motorista del Infierno, para lo que pacta un trato con un ángel, Malachi, que le promete su libertad a cambio de que se deshaga de un poderoso demonio que está punto de llegar a la Tierra. Con esta premisa, el guionista nos presenta a cada cual más despiadado y cruel personaje, todos ellos sin escrúpulos, y deseosos de derramar sangre allá por donde pasan; sin embargo, el irlandés se pierde en una orgía de muertes y de descabellados personajes, de gore y perversión en una espiral lujuriosa y decadente de la que no escapa nadie, dejándose arrastrar por lo irreverente y destructivo de sus guiones, y en una historia de traición y de advenimiento del apocalipsis se olvida de contar una historia más o menos interesante que no sea repetir un trillado argumento desde su particular y grotesco sentido del humor, que poco aporta de original.
Al dibujo se encuentra Clayton Crain que si bien realiza unas excelentes imágenes en la que el Motorista Fantasma lucha contra el Infierno, es demasiado confuso y oscuro, fallido para una historia de este tipo con esos "muñecos de plastilina" que no pegan para nada con las situaciones que plantea Ennis, a pesar de que plama más que acertadamente algunas de las grotescas ideas de éste, pero perdiéndose otras por, cómo decía, lo confuso de su dibujo, y la oscuridad en que se desarrollan los enfrentamientos.
En resumen, una limitada que quizá por estar bajo el sello Marvel Knights pierde de vista la primordial finalidad de un cómic presuntamente adulto, y se decanta por un tono caótico de destrucción y violencia que deja mucho que desear. Ennis en piloto automático, para llenarse los bolsillos. Y nada más.
Valoración: *****
Cada noche, cabalga hasta las puertas del mismo infierno tras las que podrá encontrar la libertad. Pero cada noche, cada noche, le vuelven a arrastrar abajo. La salida, a la vez tan cerca y tan lejana, es imposible de alcanzar. Por ello, tan sólo le queda encomendarse a la promesa de un ángel: quizá sea la única forma de no volver a ser torturado una y otra vez, cada noche, a las puertas de la libertad.
Antes de hacerme con la BM del Motorista Fantasma de Panini, no quería llegar virgen al personaje, y conocer al menos esos pequeños detalles que constituyen el pilar básico de su carácter, de su personalidad. Pero creo que me he equivocado de serie para ello.
En esta limitada, guionizada por Ennis, veremos el desesperado intento de huida del Motorista del Infierno, para lo que pacta un trato con un ángel, Malachi, que le promete su libertad a cambio de que se deshaga de un poderoso demonio que está punto de llegar a la Tierra. Con esta premisa, el guionista nos presenta a cada cual más despiadado y cruel personaje, todos ellos sin escrúpulos, y deseosos de derramar sangre allá por donde pasan; sin embargo, el irlandés se pierde en una orgía de muertes y de descabellados personajes, de gore y perversión en una espiral lujuriosa y decadente de la que no escapa nadie, dejándose arrastrar por lo irreverente y destructivo de sus guiones, y en una historia de traición y de advenimiento del apocalipsis se olvida de contar una historia más o menos interesante que no sea repetir un trillado argumento desde su particular y grotesco sentido del humor, que poco aporta de original.
Al dibujo se encuentra Clayton Crain que si bien realiza unas excelentes imágenes en la que el Motorista Fantasma lucha contra el Infierno, es demasiado confuso y oscuro, fallido para una historia de este tipo con esos "muñecos de plastilina" que no pegan para nada con las situaciones que plantea Ennis, a pesar de que plama más que acertadamente algunas de las grotescas ideas de éste, pero perdiéndose otras por, cómo decía, lo confuso de su dibujo, y la oscuridad en que se desarrollan los enfrentamientos.
En resumen, una limitada que quizá por estar bajo el sello Marvel Knights pierde de vista la primordial finalidad de un cómic presuntamente adulto, y se decanta por un tono caótico de destrucción y violencia que deja mucho que desear. Ennis en piloto automático, para llenarse los bolsillos. Y nada más.
Valoración: *****
2 comentarios:
Parece que no das una ultimamente ¿no? ^^u
Si... T_T Menos mal que no me he gastado un duro ni en ésta ni en Juegos de Guerra. xDDDDD
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