28 agosto 2006

¡Olvídate de mí! (Eternal sunshine of the spotless mind)

Dirección: Michel Gondry
Guión: Charlie Kaufman
Duración: 108 minutos
Intérpretes: Jim Carrey (Joel Barish), Kate Winslet (Clementine Kruczynski), Kirsten Dunst (Mary Svevo), Mark Ruffalo (Stan), Elijah Wood (Patrick)


Joel Barish, en un inexplicable arrebato impulsivo, coge el tren que lo dirigirá a la playa en vez de al trabajo. Allí conocerá a Clementine, con la que iniciará una extraña relación debido al carácter excéntrico de ésta. Pero todo su mundo se vendrá abajo tras descubrir que Clementine ha decidido borrar a Joel de su vida y de su mente, mediante un tratamiento que borra los recuerdos. Éste, herido, decidirá hacer lo mismo, aunque durante el proceso se arrepienta...


Es difícil encontrar cine de calidad hoy en día, que huya de los tópicos típicos de Hollywood y de las pautas que marcan el ritmo del mercado, con segundas, terceras e incluso cuartas partes, remakes y demás productos (generalmente) vacíos, pero parece que, por suerte, y de vez en cuando, aparecen surgidos de la nada mentes prodigiosas (como la de Michel Gondry o la de Charlie Kaufman) que nos traen films como éste, una original y nada convencional joya que sorprende y que difícilmente dejará indiferente a cualquiera capaz de acercarse a ella.


¡Olvídate de mí! es una bella y extravagante historia de amor, quizá la más surrealista de todas ellas gracias a su puesta en escena, en la que tanto el amor como la mente juegan un papel fundamental. Y es que tras decidir seguir el mismo camino que Clementine, Joel se dará cuenta mientras revisita toda su vida que por mucho que haya sido herido por la decisión de ésta de borrar los recuerdos de su vida conjunta, no hay ni un sólo instante, ni un simple segundo de su relación con Clementine que quiera borrar de su memoria.


Así, y para intentar evitar perderla y olvidar todos los momentos vividos juntos, Joel viajará por su mente a los lugares más recónditos, a los recuerdos más secretos para intentar proteger el único amor verdadero que ha experimentado. Pero el proceso no puede ser detenido, y los recuerdos junto a Clementine, literalmente, se derrumban; los sueños se entremezclan, el tiempo y el espacio no tienen límites, y el amor, a pesar de los obstáculos, siempra intenta salir a flote: ¿Está este sentimiento anclado en el mundo material, y muere al desaparecer ésta, o por el contrario perdura en un plano metafísico, capaz de sobrevivir
incluso a esta vida física, al olvido y a la muerte? ¿Son los recuerdos simplemente eso, recuerdos que evocan momentos pasados, o quizá son algo más que permiten la evolución del ser humano, algo que, como dice el dicho, nos ayuda a no "caer dos veces en la misma piedra", cometer los mismos errores que ya nos hicieran sufrir? Dos grandes preguntas que plantea el film, y cuyas respuestas es responsabilidad del espectador descubrir.

Gran parte de la fuerza de la historia que se nos presenta la tiene el reparto (un extraordinario cast, en el que todos y cada uno de sus miembros dan lo mejor de sí mismos, incluso los que tan sólo aparecen en breves y contadas ocasiones en papeles casi insignificantes), en el que destaca sobre todo la pareja principal, Jim Carrey (en la que hasta el momento es a mi parecer su mejor interpretación, a la que sólo se le acerca su trabajo en Man on the Moon, y en el que deja sus excentricidades y sobreactuaciones habituales aparte) y Kate Winslet (de las pocas actrices (y actores también) que han sabido encauzar sus carreras eligiendo acertadamente sus próximos proyectos y trabajos tras un bombazo), cuyas interpretaciones rozan lo soberbio, dotando a la pareja de una realismo y una tridimensionalidad increíbles.


Pero lo más destacable de la película es, sin ninguna duda, el guión de Kaufman (basado en un argumento de Michel Gondry (director que también realiza un trabajo fenomenal, pero que no destaca tanto debido al magnífico guión, aunque se esperan ya con impaciencia sus próximas películas, Be Kind, Rewind y Science of Sleep, ambas con guión propio), Pierre Bismuth y el propio Kaufman). De él poco más se puede decir, ya que para disfrutar de su genialidad y de toda su belleza deberéis ver la película vosotros mismos. No os arrepentiréis. Ha conseguido una obra redonda.

Valoración: *****

3 comentarios:

Raistlin dijo...

Obra Maestra.

Una peli sobresaliente, me encantó el ritmo, la historia, la música y las interpretaciones.

Jim Carrey demuestra de nuevo que es un pedazo de actor, que cuando se pone en un papel serio lo puede hacer muy, muy bien. Lástima que se le tenga estigmatizado como actor chorras...

Y esa es otra, la pésima comercialiación en España de esta peli, supongo que por querer venderla como comedia (cambio de nombre incluido).

Que ganas de ver Science of Sleep ^^

Christian "Samanosuke" dijo...

Sí, la distribución ha sido penosa. Seguro que la mitad de los que fueron a verla se esperaban una comedia al uso en las que se suele embarcar Carrey.

Supongo que has visto el tráiler que enlazo, ¿no? ¡Qué buena pinta tiene Science of Sleep!

Raistlin dijo...

Sip ^^

Muy buena pinta, que ganas, que ganas ^^