Dibujo: Steve McNiven
Tras Fuga y la sustitución del trazo recargado y los héroes llenos de músculos y sangre, se agradece la claridad de los lápices de Steve McNiven más contenidos y claros, con los que Bendis empieza de la mejor manera posible este nuevo arco, que nos depara no pocas sorpresas.
Acostumbrados como estamos al más excesivo (e incluso exasperante) decompresing del que hacen gala la mayoría de cómics de superhéroes que nos llegan desde el otro lado del charco (y del que el guionista de esta cabecera es uno de los máximos estandartes), sorprende que Bendis nos invite en este número a presenciar varios acontecimientos, llegando a contar con hasta tres tramas o líneas argumentales: la lucha de parte del grupo de estos Nuevos Vengadores con Dirk Garthwaite, un poderoso miembro de los Destructores, que pondrá en serios apuros a varios de nuestros protagonistas; la aparición por primera vez en el Universo Marvel de una importante sociedad secreta (pero no por ello de existencia banal) superheroica compuesta por algunos de los más importantes superhéroes de éste, como Namor, Mr. Fantástico, el Dr. Extraño, Charles Xavier, Rayo Negro y Iron Man; y, además, también asistiremos a un importante y revelador acontecieminto relacionado con el pasado del más poderoso héroe del mundo, el Vigía, pero "cuyo recuerdo ha sido borrado de las mentes de todos".
Bendis empieza de manera excelente este segundo arco, al que le sienta de maravilla el cambio de dibujante. Si en los primeros seis números tuvimos a cargo de los lápices a un espectacular pero farragoso David Finch, gracias a su reemplazo podemos disfrutar de un dibujo mucho más claro y sencillo (no por ello exento de espectacularidad y dinamismo en las escenas de lucha) a manos de Steve McNiven, que agiliza la lectura de este número con su fluido puño. Ya se hacía un poco pesado la extrema abundancia de músculos y venas de las que tanto gusta abusar Finch (además de sus conocidos fallos en el punto más oscuro de su dibujo, las expresiones faciales), de cuya ausencia se regocijan nuestras pupilas durante un buen tiempo (al menos hasta que llegue aquí su serie del Caballero Luna). Si bien a McNiven también se le pueden acusar algunos fallos en sus viñetas (como alguna incoherencia en la transición de éstas), no se puede negar que su puño tiene un poderoso (e interesante) futuro, del que deseo disfrutar mucho por estos lares. Habrá que estar atentos.
Valoración: 8/10. Una interesante historia a la que acompaña perfectamente el dibujo de McNiven, muy fluido, que complementa a la perfección este séptimo número (el mejor hasta el momento de la serie).
2 comentarios:
Pues mira que a mi nuevos vengadores me esta decepcionando en general... no acaba de engancharme el equipo ni la trama, y la sigo ya mas uqe nada pq está spiderman que sino...
Igual que a mí, que no me atrae nada pero la sigo por Spidey y porque va a ser la columna vertebral de parte de lo que ocurra a partir de ahora en el Universo Marvel. La verdad es que no me ha gustado ningún número anterior (y mucho menos el trato que da a Spidey en el grupo, al que para nada sabe tratar más allá de como mero payaso), pero este me ha encantado, siendo yo mismo el primer sorprendido (y más sabiendo la tirria que le tengo a Bendis con casi todo lo que escribe, a pesar de que sigo varias de sus series). Y encima me encanta el cambio de dibujante, ya que Finch no es santo de mi devoción precisamente desde Vengadores Desunidos.
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