Una gigantesca bola de luz se acerca a La Tierra. La colisión es inevitable, pero algo sorprendente ocurre en el último momento, y cuando menos se espera: la enorme bola reduce su velocidad, y encima parece aterrizar... ¡Cuando de ella surgen miles de personas! Ellos serán los conocidos como los 4400, ya que 4400 son las personas que han aparecido en el lugar. Lo más extraño es que todas estas personas desaparecieron a lo largo del siglo XX sin ninguna explicación, y aparecen sin que el tiempo haya pasado por ellos. Pero no es lo más increíble de la situación, ya que todos parecen poseer distintos poderes y dicen no recordar nada de lo vivido en su ausencia...
Entre la gran cantidad de series de calidad que nos inundan en la actualidad, es normal que algunas de estas se vean relegadas obligatoriamente a un escalón inferior que en el que repartirse las sobras de las "grandes", aquellas capaces de congregar frente al televisor a millones y millones de acérrimos telespectadores ansiosos de su dosis semanal de Perdidos, Mujeres Desesperadas o House. Situación inmerecida para muchas de estas series de "segunda división", ya que muchas de ellas, como esta fantástica serie de ciencia ficción cargada de guiños a los lectores de cómics, tienen un potencial increíble esperando ser aprovechado por alguna de las lúcidas mentes que pululan por esta renacida industria del serial televisivo, en una edad de oro que para sí quisiera el cine compatriota.
Los 4400 aprovecha descaradamente algunos de los temas más recurrentes de las colecciones mutantes (algo que no deja de ser una motivación extra para echar un vistazo a esta serie, lejos de convertirse en un lastre): el rechazo a lo "extraño", a lo incomprensible, a lo diferente; el odio irracional; el miedo a todo aquello que se salga de nuestros esquemas: el miedo a todo aquello que amenace nuestra "normalidad", nuestra monótona existencia. Por desgracia, no es un tema ficticio o que la humanidad haya enterrado para siempre, que haya quedado relegado a los libros de historia: es más actual que nunca, y, por desgracia, es motivo de noticia todos los días.
4400 personas que, sin quererlo, han sido dotadas de un don. Un don que ¿les hace diferentes?: siguen amando (aunque ellos ya no sean amados), siguen sufriendo, siguen llorando... Y siguen buscando su lugar en el mundo, una familia, la felicidad... ¿En qué se distinguen, entonces, de los demás humanos? ¿Por qué son estos dones motivo de desprecio, en vez de alegría?
Una de las situaciones más acertadas la encontramos gracias a la curiosa paradoja que se ve obligado a sufrir Richard, el militar negro desaparecido en los años 50, y que es devuelto a una época en la que ya no es tan mal visto por la sociedad como entonces (o al menos eso parece de cara al público), pero que ahora sufre la discrimación que le torturara entonces debido a su pertenencia a este grupo, ahora consideradas la raza a odiar.
La serie tiene momentos realmente memorables, y quizá el único fallo grave de esta temporada sea el mal aprovechamiento del odio hacia los 4400, ya que los violentos ataques hacia estos se justifican de una manera bastante pobre (¿venganza? Venga hombre por Dios... Un poco más de originalidad), desaprovechándose por completo esta línea argumental que tan buen resultado puede dar tratada de manera más humana (el odio, la envidia,...), y menos película de Stallone; por otro lado, y mucho menos destacable, es el bajo presupuesto con el que parece contar la serie (por lo que se ve en los pobres efectos especiales) y algunos fallos o estridencias en el argumento (o a mí me lo parecen, como lo de que hayan sido abducidos desde el futuro y luego vuelvan en una especie de nave que viene del espacio... ¿Ein?), o alguna situación inexplicable (como el porqué de que tras ser disparado Kyle desaparezcan tanto el rastro de sangre de su camiseta como su herida), pero nada realmente importante que desmerezca un ápice el resultado final.
Una notable serie que seguro atrae a muchos de los seguidores de las historias mutantes (quienes serán recompensados con numerosos guiños), y a la que, sobre todo, se le adivina un enorme potencial que espera ser explotado con mayor acierto en la segunda temporada, quizás a la espera de un guionista "iluminado".
Valoración: 7/10
4 comentarios:
Y ya veréis la mala leche que tiene Isabelle... ¡Huy perdón!, un spoiler, menos mal que no he dicho que habrá un guerra... oooops lo he vuelto a hacer XDDDD
¿No será una Guerra Civil? Ummm... Mucho friki veo yo entre los guionistas... xP
Por cierto, gracias por los spoilers. Sin ellos a lo mejor no veía la serie hasta dentro de un mes (o un año, vete tú a saber), que viendo como la maltrata A3... Como que voy a pasar.
Haz como yo: Di NO a las series de tv en televisión ¿para qué sino tenemos los reproductores de dvix y los PCs? Las series hay que verlas tumbadito en tu cama o sofá cuando a ti te apetezca, no cuando lo diga el canal de turno :-).
Y por cierto, te recomiendo que veas los 4400, es una serie muy buena (sobre todo la 3ª temporada).
PD: Hay MUCHÍSIMOS frikis entre los guionistas.
>PD: Hay MUCHÍSIMOS frikis entre los guionistas.
Jeje. Pues mira, mira: dos muestras.
Y estoy en contra de ver las series en TV (excepto para un segundo o tercer visionado, y siempre en las cadenas de previa grabación en mi DVD grabador (anuncios fuera!)), pero es que mi ordenador ya no puede más... Cualquier día me deja. xP
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